Bucéfalo
Recelas ahora de tu
sombra,
de ese otro caballo
que al galopar
agita sus crines a tu
izquierda,
nunca la tuviste en
cuenta
cuando de potro
galopabas en Tesalia…,
eras, fiero, veloz,
tozudo como un toro,
Filipo ya se arrepiente
de los trece talentos
que por ti dio,
un bruto caballo,
indomable,
que cocea las estrellas…
Tuvo que ser el joven
Alejandro
el que aplacara tus
miedos,
Bucéfalo,
el que te domara,
el que te ayudara,
a vencer el pánico
a tu sombra
cabalgando hacia la
luz,
por eso Macedonia
se os hizo pequeña,
y salisteis a
batallar,
a conquistar el
mundo,
uniste tu destino
al destino de
Alejandro
y tu sombra a la suya…
Otro precioso poema con trasfondo histórico. Pues a Bucéfalo también pensaba dedicarle un poema para un libro que estoy preparando, tal es mi interés por tan brava e indómita montura. Por cierto, Alejandro le dedicó hasta una ciudad, llamada Bucefalia. Compartiendo también la magia de tu bello versar, querido Servilio. Más besos :)
ResponderEliminarMuchas gracias, querida amiga, sabes que me alegrará mucho cuando lo escribas... sabes que casi siempre cada uno tenemos enfoques diferentes sobre los temas y, a mi eso me enriquece y me hace disfrutar... a mi me encanta como tratas en los poemas estos temas históricos... tienes tu propio sello.
ResponderEliminarFeliz tarde, un abrazo!!!