¿A quién le interesa la verdad?
Ejerciendo mi valiosa libertad,
permiso a ustedes les pido:
para empezar con la venia
hablando de la verdad
No se trata de porfiar...
La verdad, es como una oruga
se desconoce siempre la hoja
donde la puedes hallar.
Es como una hermosa joven, desnuda,
que voluptuosamente sonríe y se insinúa,
tendida sobre una piel de astracán.
Su imagen se introduce hasta el centro de las cejas,
todos quieren poseerla y tras ella todos van,
y al tenerla, más de uno, la daría por un plato de lentejas.
Copyright © Servilio Casanova Pestano| Todos los derechos reservados.
Muy interesante. Me impresiona mucho.
ResponderEliminarSaludo!
Le invito em mi blog: http://www.kulturat.blogspot.com
Gracias pawel, por su comentario. Saludos.
ResponderEliminarJajaja! Servilio que bueno ese final y que cierto que es.A él hombre se le conforma con un buen plato de comida, eso se lo he oído a mi madre y abuela, y realmente creo que es una gran verdad, por lo menos a ciertas edades.
ResponderEliminarFeliz noche Servilio.
Un abrazo.
Jajaja! Servilio que bueno ese final y que cierto que es.A él hombre se le conforma con un buen plato de comida, eso se lo he oído a mi madre y abuela, y realmente creo que es una gran verdad, por lo menos a ciertas edades.
ResponderEliminarFeliz noche Servilio.
Un abrazo.
Jeje, si que puede ser verdad, querida Carmen, eso que dices en algunos casos, aunque el poema va por otro lado, habla de la "verdad" esa verdad, que a veces es tan difícil de encontrar, y si alguna vez la encuentras te quema en las manos, porque a veces la verdad es incómoda... y como se vende y se compra también... "como aquél que vendió su herencia por un simple plato de lentejas".
ResponderEliminarMuchísimas gracias, y un fuerte abrazo.
La verdad, a veces duele, pero es necesaria para recomenzar.
ResponderEliminarYa tenia que estar desesperado el pobre, para perderlo todo por un plato de lentejas, lo triste es que pasa en la realidad.
Gracias a ti siempre, un abrazo.
Si, que duele, y es incómoda a veces, y se compra y se vende y cada uno tiene la suya... y que a veces es preferible hasta no saberla, porque descubres que incluso puede que no sea lo más importante...
ResponderEliminarGracias, amiga, un abrazo.